"No voy a dejar de hablarle sólo porque no me esté escuchando. Me gusta escucharme a mí mismo. Es uno de mis mayores placeres. A menudo mantengo largas conversaciones conmigo mismo, y soy tan inteligente que a veces no entiendo ni una palabra de lo que digo. " (Oscar Wilde)



sábado, 8 de septiembre de 2007

Informe sobre el Conejo Blanco (Cotilleos para Mangeles)


Nunca es tarde si la dicha es buena

Cuando el tren llegó a la estación, el Conejo Blanco me estaba esperando tal como habíamos quedado; le reconocí enseguida, no tanto por las fotografías que me había enviado, como por su avatar que realmente le hace justicia.

Es tal cual me lo imaginaba: sobrio, serio, comedido, algo torpón y tímido (no tanto como dice)… en dos palabras: castellano viejo (y eso no hace referencia a la edad, que conste), tiene un gran sentido del humor y, durante el tiempo que compartimos, confirmé lo que ya sospechaba: le encanta tomarnos el pelo.

Tenía programado un plan minucioso, durante una hora le acompañé a través del interesante recorrido turístico-cultural que me había preparado por las calles de su ciudad. Camina a grandes zancadas (imagino que su acompañante habitual en esos paseos cotidianos de los que nos habla tiene que ir trotando para no quedarse rezagado), aunque cuando le advertí de ello, intentó adaptarse a mi paso porque es todo un caballero. Puso de manifiesto artes de prestidigitador cuando le comenté que me hacía falta un plano para ubicar los lugares que visitábamos y, como por arte de birli-birloque, se lo sacó del bolsillo, dejándome, claro está, con la boca abierta. Concluida la hora de paseo, casi cronometrada, me llevó, como no podía ser menos, a un lugar modernista (este Conejo Blanco sabe demasiado sobre mí).

Nos refrescamos con unos granizados (no hubo cava a pesar de que era lo que yo esperaba, en eso me decepcionó, tengo que reconocerlo) mientras compartimos una conversación animada y amena sobre diferentes temas, en directo es mucho mejor conversador que en el trato virtual, y el tiempo de que disponíamos pasó rápidamente, dejándonos una, creo que compartida, sensación de tiempo insuficiente que espero podamos compensar en otro momento. Haciendo honor al personaje del Conejo Blanco, miró su reloj diciendo que se tenía que marchar; un reloj, por cierto, muy actual y de diseño moderno que me sorprendió gratamente, no era el reloj que le hubiera imaginado antes de conocerle.

Físicamente no es el armario de dos cuerpos que Mangeles me había cotilleado a escondidas (ésa ha sido una de sus muchas bromas), su estatura está dentro de la media entre los hombres de su generación, aunque tampoco puede decirse que sea bajito, su aspecto es cuidado y agradable, aquel día llevaba una camisa alegre y juvenil que le favorecía y le restaba un poco de severidad y circunspección. Para mí fue un auténtico lujo pasear en la compañía de un hombre tan atractivo (dejo el tema que no quiero que el ego del Conejo Blanco se infle en exceso, no vaya a ser que luego no haya quien le aguante, que ya sabemos que los halagos femeninos le agradan en demasía).

En resumen, fue una muy estupenda tarde de agosto en la que pude hacer realidad un deseo que pensaba que nunca podría cumplirse: conocer en persona al Conejo Blanco, todo un privilegio y un placer. Espero que después de estos comentarios no salga corriendo y me vea obligada a perseguirle como en el cuento… Ahora es él quien me debe una visita…


13 comentarios:

mangeles dijo...

Jeeee jeee jeee. uinsss. Me parece que a mí se me va a caer la baba con el conejo blanco jejjee

lemoinestar dijo...

Jajajaja, Mangeles, lo imagino, pero no te olvides que yo lo "vi" primero, :-P

lemoinestar dijo...

No es loooooooo, es leeeeeeeeee

mangeles dijo...

esBueno por si cierto conejo blanco que yo me conozco nos leee..que sepa, que este Informe ...es una cosa simplona...comparado con el infomre detallado y confidencial que la susodicha lemoinestar me dio en un privado de chat durante casi una hora.

TAAA TONTITAAA POR EL CONEJOOO JEJE JEJE
Y YO TAMBIEN..LO ADMITO...VEREMOS QUIEN DE LAS DOS SE LO LLEVA A COMER ZANAHORIAS AL HUERTO JEJE JEE

lemoinestar dijo...

¿Qué joia qué eres, MAngeles!...

A ver sis te enteras, este Conejo es muy especial, prefiere las piñas a las zanahorias. :-P

Nuria dijo...

Sorprendida me has quedado con esta entrada que no me la esperaba pues no tenía ni idea de que tú y el conejo blanco os fuerais a conocer. Pero antes de nada quiero agradecerte el que compartas con todos los que leemos tu blog, los momentos que has vivido durante tus vacaciones, el poder leer tus vivencias, y poderlas compartir contigo es algo que te lo agradezco de corazón.

Aunque este texto (por lo que veo en el título) va dedicado en exclusividad a Mª Angeles, voy a pedirte perdón, por entrar a comentarte algunos puntos de vista sobre el conejo blanco y vuestro encuentro.

Decirte primeramente, que me alegro de que os hayáis conocido, pues por lo que veo, ese era tu sueño, y poder ver cumplidos los deseos formando parte de la realidad es altamente gratificante para uno mismo.

Al describir al conejo blanco, me llama la atención cuando dices que es viejo castellano, (no tenía ni idea que lo fuera), y me gustaría que me dijeras a qué te refieres con esa descripción (exceptuando lo de la edad), aquí más o menos se diría esta expresión: “es castellano de pura cepa”.

Tú nos has descrito cómo le ves con los ojos de la realidad, ahora yo voy a tener la osadía y el atrevimiento, con tu permiso y con el de él, para decir cómo le veo yo a través de los ojos cibernéticos, de ese mundo interior, y, si me equivoco en algún aspecto, pido perdón, ante todo, al conejo blanco aludido.

Al conejo blanco le transmito corto pero exacto en palabras, piensa mucho las cosas antes de decirlas, muy serio pero con humor negro, sabe guardar las distancias, se salvaguarda con una pantalla protectora para que nadie intente traspasarla, correcto, respetuoso, educado, muy interesante, y no es nada cumplido. En definitiva, y si tuviera que definirle en una palabra sería ésta: “exacto”. Exacto en ... palabras, exacto en ... el tiempo, exacto en ... su justa medida.... exacto.......

Por lo que leo tú no le has encontrado alto de estatura, yo, en cambio, tengo que decirte que le veo grande, sí, pero grande como persona, tengo que seguir siendo sincera y creo que a su lado, me encontraría pequeña en todos los aspectos.

Ana te mando un beso con aroma casi... casi ... otoñal (aquí está así el día), y para conejo blanco .... un saludo ... pero ..... exacto.

lemoinestar dijo...

Nuria,
si te he de ser sincera ni yo misma me pensaba que el Conejo Blanco quisiera asomar fuera de su madriguera. En ese sentido fui la primera sorprendida.

Esta entrada no va dedicada exclusivamente para MAngeles, en realidad es para todos vosotros, el título en cuestión se refiere a que en diversas ocasiones hemos "criticado" al Conejo Blanco sin escondernos, sólo hace falta pasarse por el blog de MAngeles para constatarlo.

Lo de "castellano viejo" hace referencia a mi infancia, cuando en Geografía se denominaba Castilla La Vieja a la actual comunidad de Castilla-León. Creo que nuestro Conejo Blanco es como tú dices, un castellano de pura cepa, eso era lo que quería expresar con el término.

Estoy de acuerdo en todo lo que tú comentas del Conejo Blanco cibernético y el real es muy parecido, pero después de verle, me atrevo a ser un poco más osada y parafraseando al aludido Conejo... a mí me ha parecido ver amaneceres en sus púpilas... igual cualquier día nos da una sorpresa.

Después de tantos comentarios... ¿se dará el Conejo Blanco por aludido y se atreverá a dejarnos alguna palabra al respecto? (aunque sea con otro nick, aún dirá que no se lo pongo fácil).

Nuria dijo...

Ana ... sólo nos queda esperar a que conejo blanco aparezca por aquí, aunque ... si lo piensas bien ... ¡vaya difícil que se lo estamos poniendo! no va a poder superarse así mismo ya.

Un beso Ana y un saludo para conejo blanco.

Nuria dijo...

¡¡¡Andaaaaa!!! ¡¡¡¡pero si todavía no se ha pasado por aquí conejo blanco!!!! ¿¿¿y esoooo????. Espera Leimonestar que voy a sacar sus defectos a ver si así aparece jajaja.

¿Por dónde empiezo? es que se me vienen a mi mente en estos momentos tantooooossss que ni sé por dónde empezar .... vamos a ver... voy a agruparlos todos de uno en uno jajaaj: le transmito antipático, desagradecido y no sabe valorar lo de los demás ... luego sigo con ellos (si es que sigo viva) que ahora tengo que irme.

Mil besos cielo, te quiero un montón Leimonestar.

lemoinestar dijo...

Nuria,
el Conejo Blanco debe estar corriendo de aquí para allá reloj en mano... a ver si se sosiega un poco y regresa al bosque.

Vamos a darle un voto de confianza.

Miles de besos para ti también.

El_Conejo_Blanco dijo...

¡Uffff! ¿Todos estos comentarios son para mí?

Ahora no tengo tiempo...

¡Dios mío! ¡Dios mío! ¡Voy a llegar tarde!

Nuria dijo...

jajajjjajaja Leimonestar ya suponía yo que el conejo blanco aparecería pintándole como es en realidad, aunque ... pensándolo bien ... ¿será él con su nuevo sobre-nombre? ¿o será que alguien pintó su nombre? jajaja.

Besos blancos para todos.

lemoinestar dijo...

Nuria,
yo también imaginaba que El Conejo Blanco tarde o temprano asomaría las orejas por aquí, la pena es que esas prisas que siempre lleva le hayan impedido dejarnos una huella más profunda de su paso.

Por cierto... ¿insinuas tal vez que El Conejo Blanco no sea auténtico? ¡¡¡No me lo puedo creer!!! :-O

Besos sin prisas.