"No voy a dejar de hablarle sólo porque no me esté escuchando. Me gusta escucharme a mí mismo. Es uno de mis mayores placeres. A menudo mantengo largas conversaciones conmigo mismo, y soy tan inteligente que a veces no entiendo ni una palabra de lo que digo. " (Oscar Wilde)



martes, 5 de junio de 2007

Una nueva realidad





El acceso masivo a los medios de comunicación virtuales ha dado lugar a la aparición de una nueva realidad, la realidad virtual, pero una realidad virtual en la que no se trata con un programa informático sino que el interlocutor es una persona de carne y hueso, con sus fantasías y su imaginación, creándose una ficción compartida e interrelacionada. No se trata de un juego de ordenador en el que nos movemos siguiendo las pautas predeterminadas por el programador, si no que el juego se va creando interactivamente con otro ser humano, con las variabilidades ilimitadas que la conducta humana puede presentar, infinitamente superiores a las que cualquier programador haya podido incluir en el juego que ha creado.


A través de la pantalla del ordenador se crea una atmósfera de ‘realidad’ en la que se puede transitar por diferentes caminos en función de lo que cada uno de los participantes diga en cada momento. La historia se escribe sobre la marcha sin ningún guión predeterminado, simplemente las fantasías individuales que hacen que se cree una nueva fantasía mucho más rica; cada frase que se escribe abre nuevas posibilidades.


No es de extrañar, pues, que en los últimos años se haya disparado el acceso de usuarios a estas nuevas tecnologías y que cada vez haya más salas de ‘chat’ y páginas que invitan a relacionarse y a encontrar el ‘amor’. Resulta fácilmente adictivo dejarse llevar por las sensaciones que se producen en este medio, a parte de lo placentero que es poder vivir una romántica y/o apasionada historia de amor sin salir de la comodidad del propio hogar, sin pasar horas interminables de preparativos para resultar atractivos, sin desplazamientos molestos y sin tener que gastar un solo euro.


Es fácil cambiar de personalidad, dejar de ser como somos para convertirnos en lo que desearíamos ser, abandonar esa vida monótona y rutinaria por la que transitamos diariamente para adentrarnos en un mundo nuevo hecho a la medida de nuestros sueños. Y todo eso de una manera sencilla, confortable, económica, sin riesgos…


¿Sin riesgos?


Existe un grave riesgo… el confundir esas fantasías virtuales interactivas con la realidad, creerse que ese sueño compartido es cierto… Y, desgraciadamente, no está al alcance de todo el mundo evitarlo. Son muchos y muchas los que se quedan colgados de ese sueño y empiezan a vivirlo como algo real, a vivir su cotidianidad desde la euforia que produce esa droga que toman inconscientemente delante de la pantalla del ordenador. Tarde o temprano el juego se acaba "y nos despertamos, sin saber qué pasa, chupando un palo sentados sobre una calabaza”, como decía mi querido Joan Manel Serrat.


GAME OVER




www.quedeletras.com

2 comentarios:

Nuria dijo...

Cuánta razón tienes en todo lo que dices, cuando llevas un tiempo conociendo a las personas con las que hablas, y se van haciendo amigos, al final se crea un clima tan bonito, se transmiten las palabras con tanto calor y percibes tantos abrazos tan cálidos aún estando en la distancia, que ni tan siquiera en persona serías capaz de percibirlos, porque aquí puedes hablar sin ponerte nerviosa, sin que nadie te mire ni te observe, y a la vez puedes decir lo que sientes, mucho más que de palabra.

Te díré por mi experiencia que llevo entrando en el barco un año, que he hecho amistades, pero no esas amistades que te saludan simplemente, no, sino que, incluso he conocido en persona y tengo una íntima amistad con la primera persona que conocí y que nos escribimos todos los días, una amiga mía que, cada día me pregunta cómo estoy, como me siento, y que me desea los buenos días cada día con sus cartas, como yo a ella, y que incluso ha venido a mi casa con su marido a conocerme a mí y a mi familia, y que jamás había confiado, en la vida real, con nadie tanto como con ella.

Todo comenzó cibernéticamente, pero con correos, y seguimos igual, pero ya nos hemos visto, y nos conocemos en persona.

Quiero decirte con ello, que todo empieza con unos saludos, unas palabras, y al final, terminas teniendo una plena y total amistad.

Gracias guapa por tus reflexiones, que yo las siento igual.

Un beso

lemoinestar dijo...

Estoy totalmente de acuerdo contigo, Nuria. Éste es un estupendo medio para conocer muchas personas, de hecho, para mí lo ha sido. Hace tres años que entré por primera vez en esa "patera" en la que nos hemos conocido, y, a lo largo de todo ese tiempo, son muchas las personas que he conocido fuera del ciberespacio. Muchas de ellas forman parte de mi círculo de amigos, y cada vez que nos encontramos es una gran alegría. Con algunas hablo muy a menudo, con otras de tarde en tarde y con otras sólo en contadas ocasiones porque no disponemos de tiempo suficiente como para saludarnos todos los días, pero cuando conecto mi messenger o cuando subo al barco, las veo allí, y aunque no siempre hablemos, su presencia me acompaña.

Desde hace poco tiempo, hay una nueva persona entre ellas: tú.

Besos.